La Agrupación Trabajadores de Metrovías dió a conocer el siniestro, y afirma que “es el segundo principio de incendio en 60 días”. Denuncian falta de mantenimiento e “improvisación” por parte del gobierno porteño, y aseguran: “Si la situación no ha desembocado aun en una tragedia como las ferroviarias, se debe a la permanente vigilancia y reclamo de los trabajadores del subte”.
El día de 4 del corriente en la línea C, en la formación Nagoya chapa M (1207), hubo un principio de incendio en las baterías internas ubicadas en el salón, bajo los asientos de pasajeros, al sobrecalentarse y cortocircuitarse.
Si no hubiese sido por el heroico accionar del trabajador, extinguiendo el fuego, la situación hubiese sido más grave. Es el segundo principio de incendio en 60 días de estas formaciones.
El primero por un cortocircuito en los carteles lumínicos en el salón de la formación chapa I, recientemente llegada de “mantenimiento general”, interrumpiendo línea E por el intenso humo.
Una vez más, la precariedad y la improvisación en materia de mantenimiento, por parte del gobierno porteño y su controlada Metrovías, continuidad a su vez de 10 años de irresponsable aadministración del gobierno nacional, pone en riesgo la integridad física de pasajeros y trabajadores.
Si la situación no ha desembocado aun en una tragedia como las ferroviarias, se debe a la permanente vigilancia y reclamo de los trabajadores del subte. El año pasado hemos llevado desde la AGTSYP (Metrodelegados) al gobierno y a todos los organismos de control una documentada denuncia sobre el estado obsoleto de esta flota de la década del 60 y el incumplimiento sistemático de las normas de revisión periódica y reparación.
Agrupación Trabajadores de Metrovías