El Gobierno de la Ciudad cree que sólo con fotomultas va a ordenar el caótico tránsito porteño. Parte de una premisa: las fotos -sus fotos- siempre tienen razón.
Entonces, si te sacan una instantánea de tu Ford T modelo 1938 andando a 15 km/h, pero la foto impresa dice que tu velocidad superó la máxima estipulada… andá a cantarle a Gardel, o (más o menos lo mismo) a explicárselo al controlador de faltas.
Porque Rodríguez Larreta sabe que los porteños no tenemos tiempo para nada. ¡Menos, para discutir con alguien que jamás te dará la razón! Entonces, el jefe de gobierno, práctico, dispuso “un nuevo servicio para que los ciudadanos puedan resolver sus faltas de tránsito de manera ágil y transparente, a través de un chat al que se puede acceder desde el celular, una pc o tablet”.
La idea es brillante, ya que se amplía el horario de atención… para seguir recaudando (porque parece que no dan abasto): “Los controladores de faltas atenderán en el horario extendido de 8 a 20 horas y tendrán las mismas atribuciones que quienes ofrecen la atención en forma personal con la sola excepción para los casos en que se haya retenido la licencia o el vehículo”.
Todo esto, mientras tengas la voluntad de pagar la multa, claro.
Dice Facundo Carrillo, secretario de Atención y Gestión Ciudadana: “El tiempo promedio para resolver una falta por chat es de 20 minutos en total lo que representa un beneficio muy importante para el vecino que puede acceder al servicio desde el celular y evita tener que viajar a la Dirección General de Infracciones o a una sede comunal”.
Alguna ventaja tenía que tener, che.
Claudio Serrentino
Foto: Télam