La mañana del 27 de Octubre pasado, me tocó participar en la filmación del programa “Te llevo en mi sidecar”, conducido por el escritor Federico Andahazi, y que se emitirá por la TV Pública. En la Asociación de Fomento “Amigos de Villa Luro” se vivió una mañana rara, con cámaras, luces y cables, muchos cables.
“Te llevo en mi sidecar”, nuevo programa de la TV Pública, prepara una emisión sobre Juan Baigorri Velar, científico y vecino de Villa Luro que entre los ’30 y los ’50, realizó experimentos con su “máquina de hacer llover”. Y en varias ocasiones, efectivamente, hizo llover.
La prensa lo ninguneó y lo ridiculizó. Pero los testimonios de la época registraron sus hazañas en Santiago del Estero y Córdoba.
El escritor Federico Andahazi es el conductor del ciclo, que tratará diversas temáticas.
Lo cierto es que buscaban a vecinos que hayan conocido a Baigorri, y dieron con vecinos de Villa Luro que conocen su historia, y conmigo, que conozco parte de la leyenda.
Los llamados de la producción habían sido más que incesantes: casi acosadores, diría yo, durante las semanas previas al evento. Acoso que pude evitar cuando les pasé el dato del colega y amigo Marcelo Costa (“Mirando Al Oeste”, la revista de Villa Luro; desde entonces, el acosado fue él).
La tele tiene “eso” que moviliza: esa pantallita, que te la pasás mirándola, una vez te va a reflejar a vos. Fuerte. Si además, le agregás que vas a compartir la escena con un consagrado como Federico Andahazi, y que como dijo Marcelo “la TV Pública se ve en todo el país”… El stress ya está instalado. A lidiar con eso.
Finalmente, la cita fue para el 27 de Octubre a las 9 (¡a las 9!) en la Asociación de Fomento “Amigos de Villa Luro”, de Ramón Falcón 5177. Ahí estábamos, puntuales, Marcelo, Carlos Castovinci (escritor y vecino), Carlos Vistosini (Secretario de la Junta de Historia de Villa Luro) y yo.
Puntuales… para ver cómo se desarrollaban los idas y vueltas con las cámaras, las luces y los cables. Primero iban a grabar en un lado, pero había mucho ruido “ambiente”, así que todo hubo que trasladarlo hacia el segundo piso, donde los socios practican artes marciales.
Con Marcelo, aprovechamos para ir a tomar un café y ponernos al día.
Una hora y media después, pudimos ubicarnos en lo que sería la escena: una mesa, con revistas y libros dispersos por ella.
Apareció Andahazi: un tipo amable, vestido de elegante sport, que saluda y charla con nosotros para distender la cosa.
La idea de la producción era que se genere una charla informal entre el conductor y los vecinos. “Como Polémica en el bar”, sugirió un productor. “No miren a cámara y no se pisen cuando hablan porque no se entiende nada”, dijo otro.
Algo así se dió: “in situ”– pude enterarme de varias cuestiones referidas a la historia de Baigorri, sus logros y fracasos, y cómo era en su condición de vecino.
Los aportes de Castovinci, Vistosini y Costa fueron vitales para eso, y ojalá que la emisión del programa sirva para reincorporar en la memoria colectiva a Juan Baigorri Velar, este verdadero genio que no tiene el reconocimiento debido, y fue injustamente relegado a la categoría de “personalidad local”, o peor aún: mito barrial.
Para más datos, ver el programa, que todavía no tiene fecha ni hora de emisión. Pinta como muy interesante -más allá de mis comentarios de “color” en la charla con Andahazi-.
Fue una mañana rara, distinta, una linda experiencia en la que cambié la rutina de recorrer el barrio, para participar en un programa de TV. Gracias por la invitación.
Claudio Serrentino
Foto: La Bocina