
Marisa, del colectivo Basta de Mutilar Nuestros Árboles, cuenta el problema ambiental que significará retirar más de 150 árboles frondosos, para construir la ampliación de la autopista Dellepiane.
¿Qué es lo que va a pasar en la avenida Dellepiane y por qué ustedes se oponen?
Esto forma parte de un proyecto impulsado por el Gobierno de la Ciudad desde el año pasado; si bien está en carpeta hace tiempo junto con Ausa, Autopistas Urbanas, de ampliar la traza de la autopista Dellepiane hacia los costados agregando carriles, según ellos dejando un espacio en el medio para un posible Metrobús, y generando espacios nuevos, que ellos dicen que son verdes, y ahora te voy a explicar por qué no son tan verdes como ellos creen. Esto implica, contrariamente a lo que se promociona -que supuestamente va a ser una autopista parque- la destrucción de un montón de espacios verdes que ya están generados y consolidados durante décadas con una arboleda valiosísima, con un follaje frondoso que costó muchísimo tiempo lograr. Desde nuestro colectivo, nos ocupamos del cuidado del arbolado y todos estos temas que a veces son tan difíciles de visibilizar. Nos oponemos y estamos poniendo sobre el tapete el tema porque también, está como un ítem más dentro del proyecto, que es justamente la destrucción de todos estos árboles que son alrededor de 160, aunque creemos que pueden ser más. Estamos preocupados porque ya empezaron con el marcado de los ejemplares, significa que puede ser inminente la tala y estamos apoyando a los vecinos de la zona, que también están muy preocupados porque van a perder el paisaje que los acompañó durante años y además la belleza de todo ese lugar que tiene un pulmón, un corredor verde increíble a los costados que van a perder y no se recupera nunca más
Con lo que cuesta, como decís vos, los años que lleva a que un árbol sea alto, frondoso y dé buena sombra.
Es algo irreparable. Siempre hay que recordar que los árboles frondosos de décadas de crecimiento, no son reemplazables por nuevos ejemplares, por más que a uno le prometan que van a hacer plantaciones. Ni 100 árboles pequeños pueden reemplazar un árbol centenario como hay en esa zona y en tantos lugares de la ciudad, sin contar que después, además, los árboles pequeños necesitan cuidado que la mayoría de las veces no se le brindan, como ya se vio en otras oportunidades, en casos probados de plantaciones nuevas que no prosperaron. Un ejemplo: de un montón que hay en el Paseo del Bajo, el 95% al cabo de unos años se habían muerto, estaban secos, porque no se mantuvieron, no fueron elegidos adecuadamente, no se riegan, no están en el lugar que corresponde. Así quetenemos una gran preocupación, porque creemos que es inminente el arranque de la obra y estamos pidiendo si por favor se puede tener en cuenta estos ejemplares como algo que no se podría tocar.
Cuando el gobierno porteño encara esta obra que va a modificar la vida cotidiana de un montón de gente ¿hizo audiencia pública, le preguntó a los vecinos qué les parecía?
Sí, ellos en general hacen las audiencias pero ya tienen el proyecto armado. Entre los vecinos, por supuesto, hay de todo, gente que puede estar a favor, en contra, pero los que viven a la vera de la autopista son los que van a ver que el paisaje que tienen enfrente va a desaparecer, son los primeros que están oponiéndose, y la verdad es que la obra está contramano de lo que se está haciendo ahora en el mundo, que es limitar el uso del auto, tratar de desalentarlo. Hemos visto un montón de casos en grandes ciudades del primer mundo: donde había una autopista, ahora hay un espacio verde, que incluso las van sacando a las autopistas. Acá estamos haciendo lo contrario, estamos fomentando el uso del auto, proponiendo que la gente salga más todavía en auto que antes, porque está comprobado que al aumentar la infraestructura de una autopista, se genera una demanda nueva, no es que uno debería pensar “si ensancho una autopista va a haber un tránsito más fluido, menos contaminación”, cuando es exactamente lo contrario. Según estudios en el mundo, se genera una nueva demanda de la gente, y dice: ahora que hay más espacios, voy a sacar el auto, y después se genera un embotellamiento aún mayor, porque hay más autos circulando, y no se soluciona el tema del tránsito.
Al agregar un nuevo carril se anda más fluido, entonces dicen: como es más fácil andar en auto vamos en auto, y después se complica todo, y se hace el embotellamiento, como en el peaje del Parque Avellaneda, que es insoportable.
Eso es lo que prueban las pruebas científicas ya hechas en el mundo. Pero acá estamos a contramano, ensanchamos la autopista, y lo único que puede llegar a ser valioso, que es generar más transporte público con el metrobús, no es el objetivo principal del proyecto, sino una segunda etapa. Hay que ver también después cómo se implementa, porque el Metrobus iría por el medio, y habría que ver también si los accesos van a ser los correctos en una zona complicada: van a necesitar puentes, de alguna forma la gente tiene que llegar al centro, eso también habría que verlo, pero el proyecto en sí no hace tanto hincapié en eso ahora, sino en el ensanchamiento, llegar hasta 3 o 4 carriles por lado, lo cual arrasa por completo la vegetación ya establecida.
Tremendo, un golpe más a lo que es la poca conciencia ecológica que hay en Buenos Aires. Ahora, si yo no entiendo mal, Rodríguez Larreta, que era del mismo palo que Jorge Macri, apuntaba a que la gente use más transporte público.
Autopistas urbanas, durante todos estos años, operó en tierra de nadie, porque todo lo que es su jurisdicción nunca es controlada, alrededor de las autopistas se han deforestado un montón de árboles, se han quitado espacios sin explicación, cuando en realidad donde más necesitamos árboles, es al lado de las autopistas, porque mitiga la contaminación visual, auditiva, purifican el aire totalmente contaminado por el paso de los autos, es donde más necesitamos árboles. Lo mismo pasa con los trenes, también Trenes Argentinos opera con bastante impunidad, por ahí uno llega a un lugar y está arrasado, y el gobierno le echa la culpa a Ausa, se lava las manos porque es jurisdicción nacional, y el resultado es que siempre tenemos menos follaje frondoso, menos árboles añosos. Y en este caso habíamos nosotros notado que le quieren hacer un maquillaje verde, diciendo que va a haber una plantación de plantas nativas, cuando en realidad la premisa debería ser proteger lo que ya está establecido, lo que costó décadas conseguir, y no proponer a largo plazo, porque incluso nosotros hicimos un pedido de informes donde nos contestaron algunas preguntas y nos decían que, con el tiempo, el impacto va a ser positivo. Obviamente no hablan de plazos ni nada, quizás son plazos que nosotros no vamos a ver
200 años…
Sí, por ahí en 50 años se puede llegar a establecer la misma cantidad de follaje, que es incomprobable. Así que estamos muy preocupados y también con el tema, hay muchos temas que tienen que ver con esta obra, con el tema del suelo absorbente, porque ellos proponen que van a generar espacios verdes nuevos, y sabemos que van a ser todos cementados, como son los espacios de ahora. Entonces el suelo no absorbe, después hay problema de inundaciones, problemas con las lluvias, y es un espacio verde como maquillado que se genera después, porque lo viejo tiene pasto, tiene árboles altos, y lo que ellos proponen nuevo es a futuro, sin dar muchas precisiones.
Lo viejo es un medio ambiente ya establecido, ya funciona el ecosistema, está instalado, lo nuevo hay que ver si funciona.
Claro, también está el tema de la fauna. Quisiera saber qué pájaro es capaz de hacer un nido en un árbol recién plantado que con suerte mide 2 metros, y está todo raquítico. Es algo que pasa siempre también, toda la fauna que habita en esos lugares está desplazada. Va a ser un desastre si lo dejamos suceder, hay vecinos por suerte que están esperando que alguien empiece a hacer alguna obra para tratar de ir al lugar y poner el cuerpo, que siempre es lo peor que se puede hacer, porque es como que ya agotamos todas las posibilidades anteriores, y tratar de evitarlo ahí, in situ. En algún caso dio resultado la protesta vecinal. Por ejemplo, ahí muy cerca, en Lugano, se dejó sin efecto la medida de hacer un túnel bajo el tren ahí en la calle Larrazabal, que iba a arrasar con toda la arboleda de años, y un centro comercial establecido histórico, ahí en el barrio, y había gente muy preocupada por todos estos temas. Por suerte se logró frenar, porque obviamente los vecinos saben que hay problemas respecto al paso a nivel, pero proponen otras propuestas, por ejemplo hacer un viaducto y que el tren paase elevado, o una trinchera, pero nunca hacer que la calle sea la que tenga que pasar por debajo porque trae problemas, además de arrasar con los árboles, con riesgo de inundaciones, de dividir un barrio que ya estaba establecido. Pero digo que a veces las luchas pueden llegar a funcionar, pero la verdad que el proyecto de Dellepiane está bastante avanzado y lo vemos un poco más complicado, pero siempre la propuesta es tratar de frenarlo hasta último momento y visibilizarlo.
¿Cuándo empezaría la obra?
Ya están los árboles marcados, no sabemos, pero digamos que tienen vía libre para arrancar. Respecto de la cantidad de árboles afectados, estamos hablando de -reconocidos por ellos- alrededor de 160 árboles, y digo reconocidos por ellos, porque hubo gente que fue a relevar la zona con el proyecto en la mano, con los planos, y encontraron que hay árboles que no figuran en el proyecto, ni como a quitar ni como a dejar, así que probablemente sean mucho más los árboles afectados. De esos 160, prometen trasplantar 30 en base a que son árboles nativos, lo cual tampoco tiene ningún sentido, porque toda la arboleda es valiosa, no importa si son nativos o no, además de que siempre el tema de los trasplantes destruyen el lugar por más que el árbol vaya a otro lado ya ese lugar es destruido por completo y además hay que rezar para que el árbol pueda sobrevivir porque muchas veces no puede hacerlo.
Es muy complicado. En Villa Real hace, unos años alrededor de lo que era la estación Villa Real, había 2 palmeras y los vecinos dieron una lucha bárbara para que esas 2 palmeras se trasladaran a la plaza de Villa Real y finalmente lograron trasplantarla con un japonés que tenía el método y lo aplicó con los árboles que sacaron durante la ampliación de la General Paz. Salió un montón de guita, que la pagaron entre los vecinos, pero de las dos palmeras sobrevivió una.
Es una labor complicada, es un riesgo, y además un árbol, para ser trasplantado en general se lo descopa, se le cortan las raíces. Nosotros lo que siempre decimos es: lo importante acá es medir los beneficios de los árboles en follaje, follaje frondoso, es lo que nos da los beneficios y si plantamos arbolitos raquíticos que son puro tronco hasta que pueda prender y prosperar, estamos perdiendo todos los beneficios del cambio de oxígeno, de la sombra, de absorber gases, de frenar la lluvia, todo lo da el follaje. Por eso estamos en contra de la poda sistemática que vienen afrontando los últimos gobiernos hace años, porque nos sacan el follaje que es lo que nosotros necesitamos para mitigar la temperatura, después nos quejamos que hace calor, que no hay sombra.
Y hay además cada vez más cemento, no solo te sacan los árboles sino que te ponen el cemento, entonces así hacés como una isla de calor.
En una de las preguntas que hicimos sobre el proyecto de Dellepiane, preguntamos sobre la cantidad de metros cuadrados de suelo absorbente que va a haber, o que van a quitar, que nos den precisiones. Nos contestaron hablando de espacios verdes, que es algo muy general, y sabemos que para ellos un espacio cementado puede ser “verde”, porque se le pone un juego, y ellos ya lo toman como un espacio verde. Es algo que no lo tienen en cuenta. Ellos, en su vocabulario, no tienen en cuenta ni el tema del follaje frondoso, ni el tema del suelo absorbente, porque si se meten en ese tema, la estadística les da muy negativa. En todos los espacios verdes nuevos, la mayoría del piso es cementado, los caminos son súper anchos innecesariamente. Así que están un poco contramano de lo que se está estableciendo a nivel mundial.
¿Y qué se está estableciendo a nivel mundial, qué importancia le dan otras ciudades a los árboles?
Están eliminando autopistas, puentes, cosas que uno diría son cosas valiosas en su momento por infraestructura, obras que habrán salido millones, en favor de espacios verdes. Hay que googlear, y uno va a encontrar muchos casos, muchos lugares que se ven antes y el después de lugares que eran de embotellamiento total de autopistas, y hoy son plazas. Esa es la tendencia ahora, y la tendencia es desalentar el auto; lo ideal sería que la ciudad tuviera un mejor sistema de transporte público.
Y que no fuera tan densamente poblada…
Nos vamos a meter en otros temas, que por ahí no es mi especialidad, pero el tema que se dejaron de construir subtes también. Mandaron a trolls en redes, a decir que los subtes no eran necesarios, muy gracioso. Eso es otra cosa que está a contramano, porque otras ciudades latinoamericanas están sumando cada vez más kilómetros de subte, cuando arrancaron mucho después que nosotros.
Y recordemos que el metrobús no reemplaza al subte, es un carril exclusivo para los colectivos que ya existían.
Por supuesto, y que también contaminan, súper contaminante.
Contame de qué se ocupa Basta de mutilar nuestros árboles, más allá del nombre, que ya dice casi todo.
Estamos más centrados en la Ciudad de Buenos Aires pero hemos tratado temas de otros lugares del país. Vamos avanzando muy poco, porque es un tema que cuesta concientizar, cuesta entrar, pero mucha gente también se ha sumado, se ha empezado a dar cuenta del valor de algo que por ahí uno no lo tenía tan en cuenta, uno se piensa que es parte del paisaje hasta que se pone en situación y dice: es un ser vivo que me da beneficios, que me aporta un montón de cosas y que muchas veces uno lo ve sufriendo; y así fue como mucha gente empezó a sumarse. En la ciudad, estos últimos años fue una masacre de árboles, de ejemplares en sí, y también lo que decíamos: el follaje con la poda sistemática que lo van debilitando, lo va dejando con una copa allá arriba de todo, y así fue como mucha gente se fue dando cuenta de lo que estaba pasando acá en la ciudad, y después uno se va metiendo en tema, y ve que así como decimos que muchas ciudades están yendo hacia adelante, también vemos que el tema también es global, y nos enteramos que por ahí, en algún lugar puntual de Europa, se están quejando de lo mismo que nosotros acá, y decimos: al final es todo el mismo problema, que están talando, no cuidan el arbolado, no lo tienen en cuenta en nada. Es una lucha que, con el correr de los años, vamos a ser cada vez más, y se va a terminar estableciendo el valor que tienen los árboles. Ahora todavía no nos damos del todo cuenta a nivel masivo. No sé, por ejemplo, el derecho de los animales, uno piensa hace cien años los derechos de los animales eran un accesorio total, venía una perrera, encontraba un perro en la calle, te lo levantaba.
Y los mataban con gas, en una cámara de gas.
Por eso a veces digo que habría que llegar al lugar, primero que la cuadrilla mutiladora y la motosierra, que nos aterra cuando uno la escucha, porque no sabemos qué desastre va a hacer. Algún día nos movilizará como cuando venía la perrera, y en el barrio había una alarma general: ¡vienen los de la perrera!, tendría que ser algo así en algún momento.
En la Comuna 10 hay vecinos que lo salen a perseguir, han llegado a hacer denuncias y a frenar la poda de un árbol, porque muchas veces y yo creo que estos tipos deben cobrar por cada árbol que sacan.
Cobran por cada árbol, cobran por cada poda, por eso pasan muchas veces en el mismo año. Ellos tendrían que pasar cada 2 años, después los fallos judiciales dicen otra cosa. Según los fallos, no deberían pasar nunca en forma sistemática, no hacer una poda por corredor, como cuando agarran una cuadra y podan a todos, porque cada árbol tiene una necesidad y en realidad no hay motivo para podar en la ciudad salvo caso puntuales que ya sabemos, una rama seca con peligro de caída real porque muchas veces también se maquillan los peligros de caída que no son tales. Y además, el tema del presupuesto que acabás de tocar, siempre nosotros señalamos que nunca se destina para cuidado. Todo el presupuesto está enfocado en tala y en mutilación, no hay planificado por ejemplo si yo veo que mi árbol tiene un hongo, si yo llego a decirle al Gobierno de la Ciudad que mi árbol tiene un hongo, es probable que pueda venir a talarlo, nunca le van a poner una medicación que existe para tratarlo, para hacer un seguimiento. Entonces estamos desprotegidos. De hecho, en el 147, el área arbolado lo único que figura es pedido de tala, pedido de poda, no existe otra opción. El tratamiento del arbolado es eso, y hay un pedido de plantación que está medio oculto, y después también, hay que ver si prospera, pero no existe el cuidado para ellos. Entonces así es como estamos perdiendo cada vez más follaje.
¿Es decir que estamos destinando presupuesto para que saquen los árboles, no para que pongan más?
Exacto, igual también es medio un círculo porque a veces se completa, vienen a podar, los van podando a través de los años, el árbol se va debilitando porque, lo que decíamos, hay una creencia que no es cierta, de que al árbol le hace bien la poda. Al árbol no le hace bien la poda, es como cercenarlo, le pueden ingresar bacterias, hongos, enfermedades entonces muchas veces pasa que empiezan las podas reiteradas, el árbol se va debilitando, se va enfermando, después termina tan enfermo que lo terminan sacando, o se termina cayendo en una tormenta, que después se le echa la culpa al árbol cuando en general es culpa de la política de arbolado, el espacio que libre, se planta a otro y después el otro también se seca por falta de cuidado y así es un ciclo interminable en donde se va destinando presupuesto, nuestros impuestos están yendo ahí.
Cuando empieza el año, desde el gobierno dicen: vamos a plantar 12.000 árboles, por ejemplo: ¿eso es verdad, esos árboles sobreviven al anuncio, se concreta?
En general hacen plantaciones, si plantan realmente la cantidad que ellos prometen, eso es difícil de comprobar para el ciudadano de a pie. Supongamos que los plantan, el problema es el cuidado. Yo me acuerdo que hasta hace unos años después de plantar un árbol en tu vereda te llegaba un mail que decía: te pedimos por favor que lo riegues. Ahora creo que no está pasando, pero ahí tenés la pauta de que todo. El presupuesto está destinado a otras cosas, y al vecino le mandaban regar el árbol, era increíble, yo me acuerdo haber salido a regar árboles en espacio verde, porque no era vereda de nadie. En general la estadística es muy mala, porque ante la falta de cuidados, en general no prospera el árbol. Justo enfrente estoy viendo un árbol plantado, seco, que ahora tendría que estar verde por la época del año… La mayoría termina seca, esa es la verdad, y después estos árboles tan chiquitos son más aptos para el vandalismo, muchas veces cualquiera se apoya en el árbol y se termina partiendo. La ley arbolado de la ciudad establece sanciones contra el vandalismo, muchas veces pasa que en negocios o en edificios en construcción, el mismo árbol es atacado por la gente que vive en el lugar
Porque lo quieren sacar.
Sí, bueno, y esas cosas en general, en el 99% de los casos no hay sanción.
Lo que me estás planteando es que está todo al revés, el presupuesto se destina más en sacar que en plantar… Vamos en camino a ser una ciudad gris.
Teníamos un arbolado hermoso, muy abundante en todas las zonas, y se ve que se está aguantando como puede. Esperemos que en algún momento se den cuenta que esta política va más en contra de la gente que a favor, porque mucha gente todavía no lo ve al árbol como un aliado, lo ve como un enemigo. Esa es la mentalidad que habría que cambiar para que a ellos les deje de resultar negocio llevar a cabo estas acciones.
¿Cómo los pueden ubicar aquellos que se quieran sumar a esta tarea?
Estamos en todas las redes como Basta de mutilar, así que pueden googlear, estamos en Instagram, Twitter, Facebook, YouTube, así que si se quieren sumar los esperamos.
Entrevista: Claudio Serrentino