
El Movimiento de Trabajadores Excluídos (MTE) denunció que esta madrugada lxs trabajadores de la feria del Parque Los Andes se encontraron con un operativo policial que les impidió llevar a cabo su labor con normalidad.
Hace siete años, los fines de semana cientos de feriantes manteros arman sus puestos desde la madrugada, en la conocida feria ubicada en el barrio de Chacarita. Venden cosas nuevas y usadas, tales como antigüedades, libros, ropa, objetos de decoración y colección, entre muchas cosas más.
“Al igual que ya lo hicieron en otros parques, plazas y barrios, el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires se ensaña con los que buscan ganarse la vida dignamente, trabajando. Una vez más nos preguntamos: *¿a dónde quieren que vaya toda la gente que sacan de la venta?*
La feria surgió por la necesidad económica y en el 2024 tuvo un crecimiento exponencial gracias a la política de desalojos que llevó a cabo Jorge Macri con Ignacio Baistrocchi, Ministro de Espacios Públicos e Higiene Urbana de la Ciudad de Buenos Aires.
Esta feria es muy conocida por el barrio y por personas que de todas partes se acercan los fines de semana a pasear y comprar a precios muy accesibles, sin embargo *sin mediar palabra con los feriantes, se decidió de manera violenta negarle el derecho a trabajar a muchísimas personas que hoy no tienen una propuesta de reubicación*.
En sus comienzos, la feria estaba compuesta por un pequeño grupo que necesitaba trabajar y no le alcanzaba la plata para alquilar los puestos que ya había en un sector del parque, y que además no tenían más lugar. Algunos de los feriantes estaban en situación de calle, era la única manera de sobrevivir a una Ciudad que excluye y un contexto económico que aprieta cada vez más a los que menos tienen. Todos los fines de semana y feriados, llegan nuevas personas en busca de un lugar para trabajar, muchas veces no tienen espacio porque no alcanza.
*Con la crisis económica, los salarios se encuentran por debajo de la canasta alimentaria y mientras el mercado no le da lugar a estos trabajadores y los expulsa a la exclusión, tienen que rebuscarselas para poder comer. Se excusan diciéndoles a los feriantes que deben anotarse, para ingresar como feriantes, y los puestos que se asignan son a cuenta gotas. Estamos hablando de una feria de más de dos mil trabajadores entre los cuales se encuentran mujeres jefas de hogar, personas discapacitadas, adultos mayores jubilados, pensionados, inmigrantes”, señala el comunicado del MTE.
Fuente: Revista Cítrica