Durante el primer semestre, cerraron casi 8.000 empresas, y se perdieron más de 170.000 puestos de trabajo en el sector privado, según datos oficiales.
El contexto es una retracción de la actividad económica durante este 2024 proyectada en -3,5%. CEPA también publicó un informe sobre destrucción de empleo y cierre de empresas, en base a la Superintendencia de Riesgos de Trabajo, el que arrojó que:
-Entre noviembre de 2023 y abril de 2024, se redujo la cantidad de empleadores en 7.860 casos.
-En el mismo período, se perdieron 170.695 puestos de trabajo registrados (- 1,73%).
-Si se analiza la reducción de casos de empleadores, se observa que los principales afectados, en estos primeros cinco meses de la gestión de Milei, son las empresas de hasta 500 trabajadores/as: 99,5% del total de los casos (7.820 empresas menos). Por el contrario, la cantidad de empleadores de más de 500 trabajadores/as explican sólo el 0,5% (40 casos).
-Cuando se analiza la caída del empleo registrado por tamaño de empresa surge que durante los primeros meses de la gestión de Milei la expulsión de trabajadores se concentró en las empresas de mayor porte: 74% de la pérdida de empleo (-126.244 trabajadores registrados) se focalizó en empresas de más de 500 trabajadores.
En cambio, en los cinco meses que van entre noviembre de 2023 y abril de 2024, la reducción de personal por parte de las empresas con menos de 500 trabajadores/as fue sensiblemente menor: 44.451 casos, explicando el 26% el total.
En términos porcentuales, mientras que las empresas de más de 500 trabajadores/as redujeron su personal 2,64% (de 4.782.973 a 4.656.729), las empresas de hasta 500 disminuyeron su dotación 0,88% (de 5.074.200 a 5.029.749).
Estos datos resultan consistentes con el relevamiento efectuado desde CEPA de los despidos y suspensiones en el sector privado, que ascienden a 177.657 casos.
Si bien son datos brutos, es decir, no llegan a captar contrataciones nuevas sino sólo bajas, hay una correlación con el dato brindado por las estadísticas.
En el relevamiento de CEPA se desagregó la cantidad de despidos y suspensiones por grandes ramas de actividad.
La construcción es el sector con mayor cantidad de desvinculaciones, como consecuencia de la decisión de paralizar totalmente la obra pública, con 100.000 despidos estimados por la Cámara Argentina de la Construcción (CAMARCO).
Lo sigue en importancia el sector industrial, con 76.311 casos, producto de la caída del consumo tras la pérdida del poder adquisitivo de los ingresos a partir de la devaluación y la desregulación de amplios sectores de la economía.
Por último, los servicios acumulan 1.346 casos en este primer semestre.
Construcción e industria
En términos porcentuales, la construcción explica el 56,29% del total de despidos y suspensiones, la industria acumula el 42,95% de los casos y los servicios sólo el 0,76%.
Si se desagregan los datos entre despidos y suspensiones, en mayor medida se trata de despidos (167.205) y en menor medida licencias, retiros voluntarios y suspensiones (10.452).
A su vez, dentro de los despidos, la mayoría (166.870) no tiene como causal el cierre de la sucursal o empresa sino la reducción de personal. Sólo el 0,2% de los casos (335) son por motivo de cierre. En este grupo destaca el cierre de la empresa Canale en San Rafael, Mendoza, que abordaremos en detalle en apartados siguientes.
Estos despidos en el sector privado se suman a las 29.604 desvinculaciones relevadas por CEPA en el sector público, principalmente en el Estado Nacional, ya sea en la Administración Central como en las Empresas de Capital Estatal como Correo Argentino o Radio y Televisión Argentina SE.