La inflación en la Ciudad de Buenos Aires fue de 3,2% en octubre y mantuvo una dinámica de desaceleración, según datos oficiales.
El costo de vida en la capital había sido de 4% en septiembre, por lo que se verificó una disminución de 0,8 puntos el mes pasado.
En la ciudad de Buenos Aires, tiene mayor peso la canasta de servicios, que tuvieron aumento de tarifas por encima del resto del país. También impacta con más fuerza la suba de los alquileres.
De esta forma en diez meses, la inflación acumulada en la ciudad es de 122,1%, mientras que la variación interanual es de 200,9%.
El mejor dato para el Gobierno es el incremento de apenas 1,7% para el rubro alimentos, en cuyo caso sí puede proyectarse al resto del país. Esta variación es casi la mitad del índice general.
Al interior de la división, los principales impulsos provinieron de Leche, productos lácteos y huevos (2,8%), Carnes y derivados (2,1%), Pan y cereales (1,7%) y Gaseosas (5,3%). En sentido contrario, hubo caídas en verduras, tubérculos y legumbres (-3,8%).
En tanto, “vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles aumentó 4,3%, explicando con 0,81 p.p. a la variación mensual”, señaló el informe.
Por su parte, los gastos en salud se elevaron 4,5%, con una incidencia de 0,40 puntos debido a los aumentos en las cuotas de la medicina prepaga.
El ítem que más aumento fue el referido a los costos financieros con un avance de 7%. Luego aparece la indumentaria con un aumento promedio de 5%, pese a la apertura de las importaciones.
A su vez, restaurantes y hoteles promedió una suba de 4,7%.