El ministerio de Salud de la Ciudad de Buenos Aires continúa implementando un Plan Integral de Prevención contra el Dengue, con acciones específicas para reducir los riesgos de transmisión del virus.
Estas tareas son parte de la segunda etapa del Plan Integral de Acción y Prevención. Se visitan escuelas, hospitales, cementerios y otros edificios públicos para intensificar las acciones de monitoreo y control de criaderos de mosquitos Aedes aegypti.
Las acciones se llevan adelante con equipos territoriales y de salud comunitaria, que recorren activamente estos lugares, buscando identificar y eliminar los focos de acumulación de agua donde el mosquito Aedes aegypti puede depositar sus huevos.
Estas actividades son fundamentales para evitar que los mosquitos proliferen, ya que en esta etapa del año, con la llegada del calor, los huevos comienzan a eclosionar, dando lugar a los primeros mosquitos adultos.
En paralelo, el monitoreo se ha intensificado mediante la instalación de más de 260 sensores de ovipostura en toda la Ciudad, con el fin de realizar un seguimiento más exhaustivo de la actividad del mosquito. Estos sensores permiten detectar la presencia de mosquitos en áreas críticas y focalizar las intervenciones en aquellas zonas donde la proliferación es más alta.
Las tareas de prevención se coordinan semanalmente con las comunas y el Ministerio de Espacio Público para promover el mensaje de “descacharreo”, eliminando objetos que acumulan agua, y se refuerzan con la aplicación de la vacuna contra el dengue en los grupos priorizados.
El objetivo es asegurar que, cuando el virus empiece a circular, la Ciudad esté preparada para enfrentar cualquier brote con una red de prevención y atención robusta.