
Mientras desde el gobierno nacional siguen declarando impunemente –“no podés hacer un omelette sin que se rompan un par de huevos”, Lilia Lemoine, –“los buenos son los de azul”, Javier Milei-, el fotógrafo Pablo Grillo sigue luchando por su vida.
Fabián Grillo detalló el estado de salud de su hijo: “Cuando le quitaron la sedación tuvo una reacción bilateral que fue un aliciente dentro del cuadro, pero manteniendo el carácter de grave. La doctora dijo que no esperaban esa reacción y la tuvo, eso es bueno, pero nos expresó que no es cuestión de hacerse falsas expectativas; es bueno, pero dentro de la gravedad”.
También informó que se puso a disposición Hernán Quirós, el ministro de Salud porteño. Aclaró que del gobierno nacional, que tuvo a su cargo el operativo represivo del miércoles pasado, “no vino nadie”.
Vale recordar la falsa información difundida por la responsable de las acciones policiales, la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, que en LN+ declaró el miércoles por la noche que “es un militante kirchnerista que trabaja en el Municipio de Lanús (…) y está preso”. En ese mismo momento, Pablo Grillo estaba siendo operado en el Hospital Ramos Mejía, donde se constató que tuvo pérdida de masa encefálica.
Lamentablemente, no fue la única frase desafortunada del oficialismo respecto al caso. El presidente, que visitó Expoagro -organizado por Clarín-, donde no hubo señal de wifi por expreso pedido del gobierno nacional, declaró que no había ido a Bahía Blanca a “caranchear” con la tragedia y buscar “una foto linda”. Mientras le sacaban “fotos lindas” con José Luis Espert, sentado a su lado, probable candidato por LLA en la provincia de Buenos Aires.
Por supuesto, fue a la muestra a acariciar el lomo de los grandes productores rurales. Pero no perdió ocasión de pronunciar otra de sus frases desubicadas: “Los buenos son los de azul, y los hijos de puta que andan con trapos en la cara y rompen autos, queman autos y amenazan a toda la gente porque no quieren perder sus curros, esos son los malos y esos son los que tienen que ir presos y los vamos a meter presos”.
Esto decía el presidente, mientras Pablo Grillo lucha por su vida, tras haber sido víctima del accionar represivo de las fuerzas de seguridad comandadas por Milei.