En las próximas PASO locales, el gobierno porteño seguiría con el sistema de las boletas de papel. Un sector del periodismo plantea que es para complicar las chances de Gabriela Michetti, pero lo cierto es que no está garantizada la transparencia electoral, por falta de tiempo.
La victimización suma chances en la política. Basta con recordar la muerte de Carlitos Menem Jr. en la víspera de las elecciones de 1995, o el efecto “viudez” que le permitió a Cristina sumar el 54% de los votos (que dió pie al “vamos por todo”).
Ahora, desde las fuentes informativas se “victimiza” a Gabriela Michetti, la “oveja negra” del PRO que osó contradecir a su líder Mauricio Macri.
La información de “Clarín” cuenta: “En la reunión de Gabinete del Miércoles 18, se dio el visto bueno para suspender la implementación del voto electrónico en las PASO, con el argumento de que ‘no se llega a tiempo’”.
En el comienzo de la nota, se habla del “desconcierto de Gabriela Michetti ante la nueva picardía que atribuyó a la cúpula del PRO para perjudicarla”.
Hay razones objetivas que luego se desarrollarán, pero la idea -parece- es mostrar a Gabriela como un puching ball PRO a quien casi todos quieren golpear.
La misma nota habla del uso de “listas sábana” y del manejo “a piaccere” de Rodríguez Larreta del aparato partidario, para controlar el resultado de la elección desde adentro con fiscales afines.
Lamento desmentir al colega, pero lo cierto es que no habrá “listas sábana”, ya que los electores sólo podrán elegir a los candidatos a Jefe y Vicejefe de Gobierno. Es decir, habrá sólo una hoja; mucho menos que sábana, apenas un pañuelo de cuello, al menos en la votación PRO, porque las listas de Legisladores y Comuneros las armará Mauricio Macri.
Además, Michetti tiene su propia estructura partidaria en la Ciudad, con lo cual no creo que tenga problemas en conseguir a los fiscales que puedan controlar la elección.
Lo cierto es que a mediados de Enero pasado -antes de que “Clarín” presente a Gabriela Michetti como una víctima del poder partidario PRO- la ONG Poder Ciudadano había manifestado su “preocupación” por “el escaso tiempo” para la implementación del sistema, “teniendo en cuenta que las PASO este año se realizarán el día 26 de Abril y el sistema aún no ha sido definido”.
Y ése es el quid de la cuestión; en todo caso, una desprolijidad o un error de cálculo que en su momento, debieron haber denunciado Michetti y otros precandidatos que podrían sentirse afectados.
Recién a principios de Febrero de 2015 el Gobierno de la Ciudad anunció a quién había adjudicado la licitación para instalar el sistema de voto electrónico. Es la empresa “Magic Software Argentina (MSA)”, que ofertó 218 millones de pesos para instalar y controlar que anden correctamente las 9.500 máquinas de emisión de voto y escrutinio.
El sistema que se implementará (no se sabe a esta hora si en las PASO, o en las elecciones locales y nacionales) ya fue utilizado anteriormente en los comicios presidenciales de Ecuador, las elecciones en 2013 en la provincia de Salta, las municipales del mismo año en Resistencia (Chaco) y en Rafaela (Santa Fe).
Ahora, en medio de los tira y afloje de último momento en todos los estratos partidarios de la Ciudad -el cierre de listas es el 26 de Febrero– para definir precandidatos que compitan en las PASO, se preanuncia la continuidad de las boletas de papel.
La Legislatura debería aprobar una ley que suspenda la aplicación del voto electrónico en las PASO, pero eso recién podría hacerse el primer Jueves de Marzo, y necesita mayoría especial de los dos tercios de la cámara, es decir 40 votos. Aunque también podría hacerlo el Jefe de Gobierno por decreto.
Apenas fue anunciada la aplicación del voto electrónico, en Noviembre de 2014, la UCR le pidió al Defensor del Pueblo de la Ciudad, Alejandro Amor, la suspensión del nuevo sistema “porque no hay tiempo para garantizar la transparencia electoral”. Con el aval del Director Nacional Electoral, Alejandro Di Tullio, el Defensor presentó el pedido de suspensión ante el Tribunal Superior de Justicia.
Como se ve, por imprevisión o torpeza, el asunto es mucho más complicado que lo enunciado por “Clarín”: todo esto no pudo haberse hecho sólo para perjudicar a la supuesta “víctima” Gabriela Michetti.
Claudio Serrentino
Foto: Diario 26
