El Parque Rivadavia es escenario de otro enfrentamiento entre el gobierno porteño y los vecinos. El Sábado 19 de Enero, un grupo de entidades vecinales “abrazarán” al espacio verde, para manifestar su rechazo a la apertura de la calle Beauchef, que -de concretarse- le quitará una franja de casi 1300 metros cuadrados.
A fines de la década del ’20, una franja de la Quinta Lezica se convirtió en plaza, a través de la Ordenanza N° 2702, a partir del 10 de julio de 1928. Entonces la llamaron “Plaza Lezica”.
´Por aquel tiempo, ese nuevo lugar de esparcimiento mereció una aguafuerte de Roberto Arlt, titulada “Amor en el Parque Rivadavia”.
En 1932 ya se había intentado que la calle Beauchef llegara hasta Rivadavia, según dicen los vecinos, porque existía el proyecto de trasladar la Intendencia Municipal frente al Parque (imagino que en el solar que hoy ocupa el Normal 4).
Por oposición vecinal no pudieron lograr. Pero las autoridades volvieron a la carga en 1968: querían sacar una franja de espacio verde para “ordenar el tránsito”.
Con la llegada de la democracia, se sanciona la Ordenanza N° 46.229 que prohibía el cambio de destino de todo espacio destinado a parque. Sin embargo, el intendente Saúl Bouer firmó otra Ordenanza que autorizaba la apertura de la calle Beuchef.
Otra vez, los vecinos de Caballito debieron agruparse y protestar; otra vez, lograron impedirlo.
Desde su sanción en 1996, la Constitución de la Ciudad incluye como uno de sus principios, que los espacios verdes deben conservarse e incrementarse.
La idea del gobierno porteño es quitarle al Parque una superficie de 9,65 metros de ancho, por 133,7 metros de largo, con lo cual el Parque Rivadavia perderá 1.290 metros cuadrados.
Actualmente, el Parque tiene 52.111 m2. Con esta obra estaría perdiendo el 2.5 % de su superficie.
Por otra parte, la Comuna 6 cuenta con 1,5 metros cuadrados por habitante, según la propia Dirección de Estadística y Censo de la Ciudad.
Los vecinos e instituciones de Caballito están indignados. Hasta la mismísima escuela Normal 4, dependiente del Gobierno de la Ciudad, lindera al predio: “la escuela no fue informada de esta situación, ni fuimos convocados como comunidad adyacente a la obra, para emitir opinión al respecto“, dice la Asociación Cooperadora de ese colegio.
Indudablemente, el gobierno porteño no tiene ninguna intención de escuchar a los vecinos. Por eso, el Comunero de la Junta Comunal 6, Osvaldo Balossi; la Cooperadora del Normal 4 y el Observatorio por el Derecho a la Ciudad, presentaron un amparo para impedir la apertura de la calle.
Al mismo tiempo, los vecinos plantean la inconstitucionalidad de la medida, por las siguientes razones: