El sistema de elecciones en la Ciudad generó una guerra interna entre los referentes PRO de Juntos por el Cambio. Rodríguez Larreta había definido que habrá “elecciones concurrentes”, lo que desató la ira de Mauricio Macri y otros.
La ilusión duró poco: Mauricio Macri, que hasta la semana pasada se hacía el DT del PRO con aires de Guardiola, fue desangelado por quien fuera su alfil, Horacio Rodríguez Larreta.
Finalmente, el “parridicio” de Horacio sobre Mauricio, fue la única profecía que pudo anticipar el ex presidente (lo dijo en 2021), quien desde hace un par de días, está dale que te dale con las tuiteadas venenosas contra quien lo dejó afuera de las decisiones.
Macri, en su gira por los medios afines, ya había descartado a Lousteau y promovido al primo Jorge (comodín que vino de Vicente López para recuperar la cuantiosa caja porteña).
Ahora quedó con la mano levantada, pidiendo off side, mientras el elenco que rodea al jefe de Gobierno le grita el gol en la cara.
A alguien tenía que traicionar el precandidato presidencial, no se podía estar bien con los radicales y con el ala dura del PRO. Pero… ¿quién será el bendecido por Rodríguez Larreta? “Voy a apoyar a un candidato de mi partido, que es el PRO”, dijo cuando anunció los “comicios concurrentes”, esto es: candidatos nacionales por boleta de papel, candidatos locales por boleta electrónica. Lousteau no es del PRO; Acuña y Quirós sí, pero no miden; Jorge M mide menos que Lousteau. Entonces…?
¿Será mi pequeña percepción? Pero yo entendí que Horacio prácticamente daba por terminada su relación con Mauricio, al decir: “En las próximas semanas vamos a estar trabajando para definir cuál es el mejor candidato para seguir con todas las transformaciones que empezamos con Mauricio y que continuamos hasta hoy“. ¿Mañana cómo sigue…?
Entre la catarata de tuits despechados que hizo circular Macri, se destaca “qué profunda desilusión”, a coro con María Eugenia Vidal. A ese pelotón se sumó Patricia Bullrich, subrayando que Rodríguez Larreta “manipuló las reglas electorales” (lo mismo había hecho el presidente PRO en 2019). La UCR y la Coalición Cívica aplaudieron a Horacio.
Justo cuando el oficialismo nacional ya ni se preocupa por encontrar la brújula, y el escenario planteaba expectativas ciertas para llegar al poder… la muchachada de JxC se vuelve a perder en discusiones internas. Un virus radical que se transmitió entre la coalición.
Oficialismos y oposiciones vuelven a confirmar que el absurdo, en todo caso, es haber creído, en algún momento, que ellos podrían llegar a pensar en soluciones para sus votantes; y no en seguir abusando de sus votantes.
Claudio Serrentino
Foto: Diario La Voz