
La Primera Junta de Gobierno, en 1810, por idea y gestión de Manuel Belgrano, crea la Escuela Militar de Matemáticas, donde se enseñaba Aritmética, Geometría plana, Trigonometría, Geometría Práctica, etc.
Según las investigaciones del Profesor Alcides Victoriano Márquez, la escuela industrial se empieza asomar a finales del siglo XIX, cuando por un decreto del P.E. del 6/2/1897 se crea como anexo de la Escuela Nacional de Comercio, el Departamento Industrial. Al año siguiente, se designa Director Técnico al Ing. Otto Krause quien pone como objetivos, formar técnicos prácticos en la industrias de la madera, el cuero y la generación de energía termoeléctrica.
Al año siguiente, el Departamento Industrial se convierte en la Escuela Industrial de La Nación, con un plan de estudios de 6 años y a propuestas del Director Krause, se designa Vicedirector al Ingeniero Eduardo Latzina, nombre que tomó la Escuela N° 35.
El Dr. Norberto Piñero vislumbró la necesidad de tecnificar la mano de obra del país. El 25 de agosto de 1900 convoca a Federico Leluar, Ramón Santamarina, Julio Dormal, Ernesto de la Cárcova, Jorge Newbery y Carlos Agote, para fundar la Sociedad de Educación Industrial. Traigo al presente al Dr. Piñero, porque tenía una casa de fin de semana en el cercano Barrio de Villa Real; se cuenta que al Barrio se lo propuso llamar Piñero, pero ya había otro con ese nombre en el Partido de Avellaneda. Destaco la importante labor educativa del Dr. Piñero.
El Presidente Figueroa Alcorta autoriza al Ing. Krause organizar la Escuela Complementaria para Aprendices Obreros (1908). El Presidente Hipólito Yrigoyen, por decreto, establece que se debe crear una Escuela de Artes y Oficios en cada provincia (1917). En 1922 nacieron las Escuelas Municipales Raggio como Escuelas de Artes y Oficios. Su edificio fue inaugurado por el presidente Alvear. Por decreto del 6/7/1944 N° 17.854 se crea la Dirección General de Enseñanza Técnica dependiente del Ministerio de Educación.
En el año 1943, era notoria la falta de leyes que protegieran el aprendizaje y el trabajo de menores. En 1945, el Gobierno Nacional da a publicidad decretos con intención de regular esa anomalía. El Presidente Juan Perón convalida ambos decretos por la ley N° 12.921. Por ella se pone en marcha la Comisión Nacional de Aprendizaje y Orientación Profesional. Se crean centenares de escuelas de aprendizaje, donde la juventud argentina, se orienta y perfecciona en las diversas técnicas industriales.
Los cursos de aprendizaje estaban destinados a menores de 14 a 18 años que hayan cumplido con la enseñanza primaria . “Al finalizar el ciclo básico, los alumnos que lo cursan obtienen su título y son dueños de una formación que brindan trabajo idóneo y futuro”. En 1945, se estableció que al Estado le correspondía la vigilar, controlar y la dirección de trabajo y aprendizaje de los menores de 14 a 18 años. En 1949 funcionaban en el país 122 establecimientos de enseñanza técnica, preparando, capacitando obreros para la industria: “es el obrero el hombre del mañana, y es necesario formarlo para que se desempeñe con eficacia en ambos sentidos, cuidando tanto su cultura y su moral, como actitud profesional. Perón”.
Los documentos y requisitos para ingresar en escuelas técnicas: tenían que tener una edad no menor de 13 años, ciclo escolar primario, certificado de estudios y vacunas. Las llamadas Escuelas de Aprendizaje estaban destinadas a los menores egresados de la escuela primaria. “Esta vasta organización crea en nuestros niños saludables hábitos de amor al trabajo y sustrayéndolos al ocio infecundo, los liberará de influencias perniciosas y contribuirá a la formación del hombre cabal”.
Las Escuelas Fábricas formaban técnicos para la industria, luego lo perfeccionaban para fomentar y organizar la producción en zonas cuyo nivel de vida no estaba a la altura del ritmo general del progreso del país. La Escuela N 35 es producto de todos estos avances en materia de educación industrial.
Susana Boragno