La catarata de aumentos propuesto por el Gobierno de la Ciudad para 2017, juega decididamente en contra del objetivo inflacionario del gobierno nacional. La mayoría de los reajustes no se arriman, siquiera, al 20% de inflación que pretende Macri para este año.
“La inflación está bajando y el año que viene vamos a estar debajo del 20 por ciento“, dijo el Presidente Mauricio Macri en diálogo con Telefe Noticias, a mediados de 2016.
Macri, sobre el fin del año pasado, no se privó de tildar como “irresponsables” a los diputados de la oposición, cuando éstos introdujeron cambios en el Impuesto a las Ganancias.
¿Dirá lo mismo el primer mandatario de su sucesor en la Jefatura de Gobierno de la Ciudad, que no es opositor, por el contrario, pertenece a su misma línea política?
Porque la gestión que encabeza Rodríguez Larreta, si bien prevé una inflación del 17% para este año, aumentó -o pretende aumentar- casi todos los impuestos a mucho más del doble de lo previsto, a saber:
ABL: aumenta hasta el 38% (promedio 30%).
PATENTES: suben 17%.
PEAJE DE AUTOPISTAS PORTEÑAS: AUSA propone aumentar el 52,3% en las autopistas 25 de Mayo e Illia. Además, elevar a 8 las “horas pico” (lunes a viernes de 7 a 11 hacia el centro, y de 16 a 20 hacia provincia).
PEAJE DE INGRESO A LA CIUDAD POR ACCESOS NORTE Y OESTE: Más del 100% promedio. Además, elevar a 8 las “horas pico” (lunes a viernes de 7 a 11 hacia el centro, y de 16 a 20 hacia provincia).
PARQUÍMETROS: aumenta 100%, pasa de $ 8 dos horas, a $ 8 por una hora. Además, progresivamente aumentarán las zonas en las que habrá que pagar por estacionar.
SUBTE: La empresa estatal SBASE había convocado a audiencia pública para aumentar 33% (de $ 7,50 a $ 10). Pero la suspendió hasta recibir “nuevos datos técnicos”. Cabe acotar que hace dos meses había aumentado el 65% (de $ 4,50 a $ 7,50).
Luego de evaluar la voracidad de los reajustes, se podría llegar a la siguiente conclusión: ¿Rodríguez Larreta no confía en el pronóstico inflacionario de Macri?
Como sea, la injerencia de estos aumentos puede incidir en la inflación. El traslado de mercaderías se verá directamente afectado, por ejemplo.
Otra cuestión: hay muchos porteños que trabajan con el auto, y no pueden hacerlo a través del transporte público (viajantes, vendedores, corredores, técnicos, profesionales, etc.) porque trasladan elementos que necesitan, como herramientas. A éstos, cada vez se les encarece más andar día a día por la Ciudad.
Si quieren combatir la inflación, deberían predicar con el ejemplo, con buena administración y austeridad.
Es muy fácil definir el porcentaje y aumentar las tarifas; pero hacer de Buenos Aires una ciudad en la que se pueda vivir bien… Mmm…
Claudio Serrentino
Foto: Taringa
